Cerdito Jamones es un pequeño animalito que quería vivir una experiencia nueva. Siempre estaba en una cuadra. Un día se animó a salir a la calle y al cruzar la esquina vio una casita muy bonita. Era pequeña y con mucho jardín, pero Jamones la veía como una gran mansión.
¡¡ Toc , toc !! Llamó a la puerta un poco tímido y su asombro fue cuando le abrió una pequeña gatita. La gatita le invitó a entrar y le presentó a toda su familia. El cerdito Jamones, muy contento, se quedó a comer con aquellas gatitas. Mientras comían Kitty, que así se llamaba una de las gatas, le propuso que se quedase a vivir con ellas. El cerdito Jamones sin pensarlo dijo que sí y se puso muy feliz.
Así pasaban días y días y el cerdito Jamones ya no podía separarse de aquellas gatas en esa gran mansión.
Sonia Moreno Fernández
Me encanta la mansión. ¡Es más grande que mi casa!
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